“AYAYEROS DE YOYO CAVAN SU TUMBA”

Indignación por el “tráfico” de puestos de trabajo
“AYAYEROS DE YOYO CAVAN SU TUMBA”

La misteriosa práctica de tráfico de los puestos de trabajo, a cargo de allegados y partidarios de confianza del alcalde y algunos funcionarios, parece haber colmado la paciencia de los ciudadanos que no encuentran la “fórmula mágica” de otros bienaventurados que sospechosamente se trasladan de obra en obra, donde el pago es de régimen de construcción civil.
“En esta detestable actividad están metidos hasta el guardaespalda Jov, el papeluchero Serafín, el fungido asistente Roy y los regidores de “Nosotros por Moquegua”, dijo un desafortunado joven quien desde enero a la fecha no puede conseguir un puesto de trabajo, pese a las constantes anotaciones que realizan en la comuna provincial.
Otro necesitado de trabajo que peina canas de tanto esperar la bendición de los bienhechores que se encuentran pasando tiempo en las afueras de la oficina de alcaldía, soltó todo el furor de su indignación, señalando que los “ayayeros de Yoyo vienen cavando su tumba político…” que podría concretarse el próximo año.
Mientras tanto, un grupo de desempleados de la zona de Chen Chen que no pudieron acceder a ninguna obra de la relación que fue publicada en días pasados, mostraron su disconformidad por la forma cómo algunas familias tienen la “sospechosa” suerte de laborar sin siquiera haber caminado un día entero en las afueras del municipio.
Dentro del costal de los presuntos traficantes del puesto de trabajo, también se encuentran algunos regidores del oficialismo, quienes a vista y paciencia del alcalde estarían acomodando a sus familiares en diferentes áreas de la Municipalidad, según lo manifestado de los quejosos que no quisieron identificarse por temor a la represalia laboral.
“La oportunidad laboral para todos ofertada por Edmundo Coayla se la llevó el viento”, indicó una madre de familia, tras dejar constancia de la marginación laboral del cual dijo ser objeto en los últimos tiempos, por no tener una relación amical o familiar con los séquitos del burgomaestre moqueguano, cuya imagen político se viene deteriorando paulatinamente.