Una protesta sin mayores logros
Para los residentes y representantes del anexo de Huatalaque, sólo bastó la presencia e intervención de los funcionarios de la Sub Gerencia de Estudios y Obras del Gobierno Regional, quienes con la facilidad que los caracteriza, engañó a los reclamones con el cuento de la elaboración de un nuevo expediente.
Tras asegurar la elaboración del proyecto en un plazo de 45 días y la liquidación e investigación sobre los presuntos actos dolosos cometidos en la primera fase de la obra, los funcionarios también comprometieron su palabra para el reinicio de la ejecución de la obra en octubre próximo, sin precisar el año.
Sin mayores quejas ni protestas los representantes de la comunidad de Huatalaque, aceptaron la propuesta sin percatarse de la fuente de financiamiento que sobrepasaría los 4 millones de soles y olvidando que la elaboración de un proyecto de dicha naturaleza demanda mayor tiempo hasta su aprobación.
Por lo visto y teniendo en consideración el accionar de la administración burocrática, los entendidos presumen que el reinicio de la construcción de la carretera Charijón-Huatalaque, tendrá lugar en el próximo año, cuando haya iniciado la fiebre de la campaña electoral regional y municipal.
LA IRA DEL RESIDENTE DE OBRA
Luego que los ciudadanos de Huatalaque se movilizaron hasta las instalaciones del Gobierno Regional a reclamar el reinicio y culminación de la carretera Charijón-Huatalaque, el residente de la obra Bratson Meléndez Álvarez, habría tratado de conminar a los dirigentes de la comunidad a desmentir lo expresado en los medios de comunicación.
La discusión entre el ingeniero residente de obra y los pobladores, incluso tuvo lugar en plena plaza de armas de la ciudad de Moquegua, donde los naturales de Huatalaque fueron increpados por el referido profesional, aduciendo que no eran de la jurisdicción del distrito de Cuchumbaya.
Bratson Melendez, jamás habría pensado que el pueblo de Huatalaque le iba salir al frente para dar a conocer su malestar por los malos manejos económicos que como responsable realizó en la ejecución de la obra, aunque intente justificar con artimañas el balance económico que aparentemente fue malgastado.
Para los residentes y representantes del anexo de Huatalaque, sólo bastó la presencia e intervención de los funcionarios de la Sub Gerencia de Estudios y Obras del Gobierno Regional, quienes con la facilidad que los caracteriza, engañó a los reclamones con el cuento de la elaboración de un nuevo expediente.
Tras asegurar la elaboración del proyecto en un plazo de 45 días y la liquidación e investigación sobre los presuntos actos dolosos cometidos en la primera fase de la obra, los funcionarios también comprometieron su palabra para el reinicio de la ejecución de la obra en octubre próximo, sin precisar el año.
Sin mayores quejas ni protestas los representantes de la comunidad de Huatalaque, aceptaron la propuesta sin percatarse de la fuente de financiamiento que sobrepasaría los 4 millones de soles y olvidando que la elaboración de un proyecto de dicha naturaleza demanda mayor tiempo hasta su aprobación.
Por lo visto y teniendo en consideración el accionar de la administración burocrática, los entendidos presumen que el reinicio de la construcción de la carretera Charijón-Huatalaque, tendrá lugar en el próximo año, cuando haya iniciado la fiebre de la campaña electoral regional y municipal.
LA IRA DEL RESIDENTE DE OBRA
Luego que los ciudadanos de Huatalaque se movilizaron hasta las instalaciones del Gobierno Regional a reclamar el reinicio y culminación de la carretera Charijón-Huatalaque, el residente de la obra Bratson Meléndez Álvarez, habría tratado de conminar a los dirigentes de la comunidad a desmentir lo expresado en los medios de comunicación.
La discusión entre el ingeniero residente de obra y los pobladores, incluso tuvo lugar en plena plaza de armas de la ciudad de Moquegua, donde los naturales de Huatalaque fueron increpados por el referido profesional, aduciendo que no eran de la jurisdicción del distrito de Cuchumbaya.
Bratson Melendez, jamás habría pensado que el pueblo de Huatalaque le iba salir al frente para dar a conocer su malestar por los malos manejos económicos que como responsable realizó en la ejecución de la obra, aunque intente justificar con artimañas el balance económico que aparentemente fue malgastado.
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